¿Por qué cultivar con productos orgánicos?
Las principales diferencias radican en que en el caso de los químicos, su acción es mucho mas directa y su efecto mucho mas agresivo. Esto tiene varias implicaciones, en primero lugar podemos decir a su favor que los químicos se podrían considerar como una rápida solución para los problemas. Per no siempre la solución rápida es la mejor. A fin de cuentas, no siempre es necesario matar moscas a cañonazos.
Los productos orgánicos tienen varias ventajas respecto a los químicos. En primer lugar, tienen mucho mas margen de maniobra y su efectividad es longeva en el tiempo. Empleando este tipo de productos no solo consigues resultados de efecto inmediato (nunca tan inmediato como el químico) si no que además consigues mejorar multitud de aspectos que se ven afectados positivamente por el uso de materias orgánicas (fertilidad, vida microbiana, capacidad de intercambio catiónico, estructura de suelo, retención de humedad, etc)
Por el contrario, la agresividad del químico puede implicar (y de hecho en muchos casos a sucedido) que ciertos aspectos que rodean nuestras plantas se vean afectados negativamente. Es decir, si por ejemplo necesitamos nitrógeno rápido para suplir una determinada situación de carencia, es posible que el aporte de un químico sea la solución más rápida, pero si por ejemplo hemos leído mal la situación y no existe dicha carencia, o si por ejemplo aportamos más cantidad de la que realmente necesitamos, puede dar lugar un efecto contrario más difícil de tratar que la situación de partida. Bloqueos, desertización del suelo, debilidad del cultivo, etc.